Tendríamos que salir a encontrarnos. Salir a la calle desnudos con un abrigo y echar a correr.
Notar el frío en la cara, tumbar el pulso que nos echa el tiempo y decirnos cuánto nos hemos echado de menos.
Creo que simplemente es eso. Deberíamos volver a tocarnos, volver a dejar a la ópera a la altura del chapurreo con nuestros gemidos, retomar el solo de batería que siempre hizo tu corazón con el mío.
Y por si esto que te digo te sabe a poco; apuesto todo a tus manías y te aseguro que deberíamos volver a querernos. Sí, por si acaso a algún idiota se le ocurre romperte el corazón antes de que yo lo haga.
Que el orgullo y la rabia sean nuestra bandera. Qué más da mientras enredemos nuestras piernas en ella, no todas las guerras acaban a tiros.
Tendríamos que reconocernos méritos, por llegar a insultarnos tanto como a adorarnos.
Tendríamos que marcarnos, como putos animales.
Que cada ingrato que te toque sepa que perteneces a las cuatro patas de mi cama, a los cinco dedos de mi mano, a los siete días de mi semana; a mí.
Tendríamos que matarnos a besos y no a distancia. Hay un camino ardiendo desde todo lo que te digo a lo que te diría; hay años luz entre todo lo que te odio y lo que te podría llegar a querer.
Tendríamos que salir a encontrarnos
de todas formas
ya estamos perdidos.
Irene X